Mis manías me mantienen en contacto con mi juventud. De hecho, las cultivo desde niño
Hoy no hay un solo totalitarismo que no se proclame democrático. He aquí el sublime adjetivo que lo resuelve todo
Federico Ibarz, como todo melancólico atenuado, deformaba la realidad. El doctor Andrade, como genuino optimista, la desconocía por completo